Diseñando una oficina para los nuevos tiempos
La tecnología sigue avanzando y mientras todos piensan que los humanos seremos reemplazados por máquinas, un reciente estudio sobre contratación revela lo contrario. El mundo se mueve hacia la búsqueda de una de las habilidades humanas más enigmáticas ¿Cómo hacer para implementar estas nuevas ideas en tu oficina? Descubrilo en este artículo.
La creatividad es la capacidad humana innata de generar ideas, resolver desafíos difíciles y aprovechar nuevas oportunidades: es el combustible para la innovación. Muchos de los desafíos empresariales más desafiantes de hoy requieren un pensamiento imaginativo para resolverlos, y la creatividad es un componente esencial para que las empresas crezcan.
A medida que la tecnología hace más eficientes los procesos, las personas se dedican a inventar nuevas ideas e implementarlas.
Una famosa organización internacional reveló que el 52% de los directores ejecutivos tienen la intención de contratar más gente, pero en especial de mentes con habilidades que no pueden ser replicadas por máquinas.
La fuerza laboral que viene
Las nuevas generaciones ingresando al ámbito laboral valoran la autonomía y el control, lo que denota su interés por la autoexpresión, el confort, las conexiones sociales y la búsqueda de un significado profundo en su labor. Esto implica que las compañías necesitarán adoptar enfoques diferentes para atraer, retener e inspirar a estos profesionales emergentes.
Las compañías deben reconocer que la creatividad constituye un procedimiento accesible para todos, siempre y cuando se adopten conductas y métodos de trabajo apropiados. Así, en lugar de administrar proyectos de manera lineal, la solución a problemas complejos demanda actualmente una exploración interdisciplinaria en territorios desconocidos, agilidad e iteración, así como pensamiento divergente y convergente. El desarrollo creativo de tareas es fluido y, en muchas ocasiones, caótico, incorporando recurrentes callejones sin salida y fallos que se convierten en parte integral de un ciclo de aprendizaje.
De manera paralela, el entorno laboral tiene como misión impulsar ese proceso creativo. Investigaciones científicas subrayan conexiones sólidas entre la cognición creativa y el ambiente físico.
La sinergia entre el espacio y la tecnología puede hacer más efectivo el trabajo creativo cuando se diseñan como un sistema integrado y holístico. Los siguientes tres principios de diseño ofrecen una orientación para concebir ambientes que fomenten la creatividad:
- Establecer una conexión emocional: La inspiración ambiental y los elementos de diseño cuidadosamente seleccionados estimulan el pensamiento y contribuyen a la construcción de una cultura de equipo. Es crucial proporcionar comodidad física y emocional en un entorno cálido y acogedor que anime a las personas a explorar diversas soluciones visualmente. Estos espacios deben fomentar la experimentación y la interacción con la tecnología integrada.
- Fomentar la confianza creativa: Es esencial capacitar a todos los empleados para abordar problemas complejos, sin importar su posición jerárquica en la empresa. Las oficinas deben permitir un acceso equitativo a todos los espacios, herramientas y tecnologías para promover la participación justa. Dispositivos informáticos a gran escala posibilitan que todos contribuyan e interactúen con el contenido.
- Desarrollar un ecosistema dinámico: Contar con una variedad de espacios de diferentes tipologías, donde las personas pueden elegir el entorno que mejor se adapte al momento, impulsa el proceso creativo. Esto favorece momentos de exploración individual, descanso, interacción social, co-creación y evaluación. Asegurar una conectividad fluida entre estos espacios respalda el flujo de información y experiencias. Las tecnologías basadas en la nube facilitan esto, permitiendo que el trabajo se traslade con las personas a medida que se desplazan de un lugar a otro.