Todos los colores influyen subconscientemente sobre nuestro estado de ánimo y mecanismos de toma de decisiones. Por ejemplo, una tonalidad a la que se le ha hecho mucha prensa es el rojo por su capacidad para llenar de energía a las personas; incentivándolas a lograr de una manera más pronta sus tareas (con el riesgo de provocarles síndrome de “burnout” si se lo utiliza en exceso).

El azul oscuro (también llamado «marino») al ser más discreto, termina siendo menos difundido y recomendado que otros colores. Provocando que muy pocos sepan las numerosas bondades que aporta a aquellos que deciden incluirlo en la decoración de su espacio de trabajo. Dicho esto, nombremos algunas de sus ventajas.

Principales Ventajas

1. En primer lugar, el azul marino es recomendado por sus capacidades para mejorar la concentración de las personas. Al ofrecer un ambiente relajante y en las antípodas de uno de “amenaza” (como el que provocaría la presencia de un tonalidades rojas o amarillas); le permite a la persona concentrarse en sus tareas. Si bien esto es ideal para casi todo tipo de trabajo, sus ventajas se potencian en puestos que requieren un alto nivel de creatividad o concentración, como agencias de marketing, estudios de ingeniería o de programación.
2. A su vez, las cualidades de esta tonalidad provocan sensaciones de orden, reduciendo así los niveles de estrés entre los empleados y potencialmente mejorando la toma de decisiones. Esto se debe a lo previamente mencionado acerca de la característica “no agresiva” de este color.
3. En cuanto a los efectos que provoca en aquellas personas externas a la organización (cómo clientes o visitantes), podemos decir que el azul oscuro transmite una intensa sensación de profesionalidad. Esta es la razón de por qué varios de los más grandes estudios jurídicos o financieros eligen este color para sus instalaciones o elementos de marca.